René Loyo Cárdenas
Que difícil se vuelve
la vida si con los años una persona -hombre
o mujer-, desarrolla un abdomen
voluptuoso. Las bromas o memes están al día, señalados como los “chistositos”
por su cuerpo de “risa”, a los que se les recuerda que pronto darán luz a
muchos perritos. Estos son los individuos que con el correr de los años
desarrollan una baja autoestima. Se inscriben en el gimnasio, pasan los días y la
panza no cede y el entrenador solo sabe repetir “hay que echarle más ganas, hay que hacer más abdominales” y más
pronto que tarde llega el día del fastidio, en el que termina diciendo: “basta
ya”, “me rindo” “así soy”, “basta de sacrificios y al día
siguiente abandonan el gimnasio y lo primero que comen son aquellos alimentos que tenían prohibido. Asumiendo que esa
prominente panza es “normal”, es un
asunto del destino “porque de niños su madre no los fajo lo suficiente”.
Sin embargo esta
resignación no es normal como tampoco esa enorme barriga que no se puede esconder
en un vestuario sumamente grande. Si
existe un remedio para los panzones de
barriga doble y expansiva. Esta panza puede
disminuir si nos informamos de los avances de los alimentos naturales y nos
referimos específicamente a las propiedades que contiene el nopal. Incorporar
la fibra de nopal es un asunto de conocimiento, de buenos hábitos y mucha
fibra.
Diferentes
tipos de prominentes barrigas
Partimos de que una
panza prominente no es normal, mucho menos aquella que aparece por un tiempo y
después desaparece, esto sin duda es ocasionado por los malos hábitos
alimenticios. Vamos por partes reconociendo los diversos procesos que facilitan
un estómago abultado:
Donde está nuestra
barriga, allí se encuentra el sistema digestivo. Cuando llegan los alimentos en
el estómago se libera una sustancia llamada proteasa, que es la que facilita la
digestión de las proteínas y se produce ácido clorhídrico que permite asimilar
mejor los alimentos. Una vez que los alimentos pasan por el estómago se
trasladan a los intestinos tanto el delgado como el grueso y terminan de
absorber los nutrientes a través de unos movimientos llamados perístasis o
espasmos. Si los intestinos no realizan de manera adecuada su trabajo se dice
que la persona tiene una mala digestión y aparece una panza inflamada que en
ocasiones presenta dolor y malestar general, como pesadez.
Si la persona come
alimentos altamente procesados, demasiada azúcar, o edulcorantes ocasiona
gases, la panza se inflama y la situación se complica si no se tiene el hábito
de beber agua. Si no hay la suficiente agua trastorna la función intestinal ya
que los intestinos tienden a no trabajar y se inflaman.
Otra manera de producir
una gran panza sin duda es el mal hábito a la hora de comer los alimentos,
comer demasiado rápido, incluso tragar, esto va a ocasionar nuevamente inflamación
intestinal con digestión lenta y pesadez.
Una panza abultada
puede ser producto también de un exceso de gases intestinales y se debe a que
es el aire que tragamos cuando comemos, y queda atrapado en el esófago y sale
en forma de eructo, pero si queda atrapado en los intestinos sale en forma de
flatulencias ocasionando dolor y mal olor. En muchas ocasiones esto último es
producido por alimentos como la coliflor o los frijoles y si los gases no
pueden salir de manera inmediata se produce otro tipo de panza.
Comer de manera constante y desordenada provoca
la inflamación de los intestinos así como la acumulación de restos de comida
que al no poder ser evacuados tienden a
entrar en descomposición, y cuando llegan nuevos alimentos se obstruyen y
generan un circuito de putrefacción, más tarde se van a acumular grandes
cantidades de grasa en el estómago.
El mal funcionamiento
del hígado o de la vesícula favorece la aparición de una gran panza. Una dieta
en la que no controla la sal produce un trastorno en algunos puntos de nuestro
organismo. Si el hígado o la bilis no realizan su trabajo adecuado las
digestiones se vuelven pesadas, acumulan grasa y toxinas.
Otra manera de tener
una barriga inflamada es la que se conoce como la disbiosis o atrofia
intestinal que consiste en la pérdida de masa bacteriana benéfica o
microbiótica intestinal producida por el uso desmedido de medicamentos y que
llevan a causar otro tipo de enfermedades intestinales. Aquí podemos sumar los
malos hábitos alimenticios, el sedentarismo, el estrés, la automedicación son
factores externos que llegan a modificar la microbiota intestinal y generan
síntomas como diarreas, estreñimiento y dolor abdominal, aunque la disbiosis es
difícil de diagnósticar, muchos médicos la encasillan como parte del síndrome
del intestino irritable.
Desde el punto de vista
de la salud mental algunos psicólogos como Willian Herbert Sheldon, en 1940,
desarrolló la teoría a partir de los tipos de cuerpo, así que otros han
agregado que un vientre sumamente abultado puede considerarse dentro del
apartado de las enfermedades denominadas como somatotipo, y consideran que
aquellas personas que tienden a desarrollar mucha panza, son individuos que se
comen sus problemas en dos formas, la primera es que comen mucho en exceso,
desarrollando un desequilibrio psicológico y
que requieren ayuda especializada. La segunda es que las personas se
comen sus problemas, su cuerpo de manera inconsciente va acumulando un exceso
de grasa en la zona del vientre como si el cuerpo intentara mostrar que está
pasando por una compleja situación de estrés o depresión.
El
nopal
De acuerdo a la
Organización Mundial de la Salud (OMS), señala la importancia de la ingesta de
fibra aproximadamente de 35 gramos al día por persona ayuda a prevenir muchas
enfermedades como estreñimiento, colesterol, triglicéridos, intestino irritable
e incluso diabetes.
El nopal forma parte de
la llamada fibra soluble que se caracteriza por ser viscosa o babosa, y tiene
la facilidad de fermentarse y cumple con la función de regular la motilidad
gastrointestinal.
La motilidad
gastrointestinal es la acción fisiológica del aparato digestivo encargada de
desplazar el contenido de la boca hacia el ano. La actividad de las células
musculares lisas y células musculares circulares es la responsable del
desplazamiento del quimo por el aparato digestivo.
El
Quimo
La comida es reducida
al máximo y se conoce como quimo. Es lo suficientemente pequeño el alimento que
puede pasar del estómago al intestino, esto estimula al páncreas a producir un
fluido que contiene alta concentración de bicarbonato. El cuerpo genera otros
fluidos o gases a través de la vesícula, el hígado y las glándulas en la pared
del intestino. Cuando el alimento es suficientemente reducido es absorbida por
la pared intestinal y se transporta al flujo sanguíneo. Cuando todos los
nutrientes del quimo han sido absorbidos, pasan al intestino grueso aquí
algunas bacterias rompen las proteínas y los almidones. El material desecho se vuelve semisólido y se
conoce como heces. Las heces pasan al recto y permanecen allí hasta estar
listos para ser expulsados durante la defecación.
Que
sucede cuando comemos fibra soluble (nopal).
Si se es constante la
ingesta se vuelve adecuada para el organismo ya que ayuda a proteger las
paredes del colon y evita que las heces fecales se puedan quedar atrapadas en
los intestinos.
Estimula los movimientos
peristálticos de nuestros intestinos, mejorando las evacuaciones y eliminando
el estreñimiento crónico. Previene la formación de gases, producto de la
putrefacción de los alimentos, en el tracto digestivo. Y restablece el
equilibrio de la flora intestinal. Previene la aparición del cáncer de colon,
reduce el colesterol y los triglicéridos en el cuerpo, previene la formación de
piedras en la vesícula y se eliminan los problemas de fatiga y cansancio, pues
al tener los intestinos limpios y en buen estado de trabajo, el cuerpo tiene
mayores niveles de energía y absorbe de mejor forma los nutrientes.
Bibliografía:
Elimina
esa pancita comiendo fibra. Revista saludable. No.13 Corporativo Mina. México
La
obesidad en México un problema de salud
pública. René Loyo Cárdenas. 2019. México
El
nopal Opuntia. Nopal deshidratado. René Loyo Cárdenas. 2017. México.
Las
propiedades del nopal. FAO. 2012.
Foto:
Forbes