sábado, 22 de febrero de 2025

Cuentaselo a Claudia

 

Cuéntaselo a Claudia

René Loyo Cárdenas.


Tennessee.  El 13 de febrero los medios de información de esta ciudad dieron cuenta de un operativo donde personas sin identificarse se llevaron a tres trabajadores mexicanos. Solicitamos información al consulado quien se niega a proporcionar por no ser familiar de ninguno de los tres, (que raro que utilicen el mismo argumento que se tenía a quienes defendían los derechos humanos de los niños en situación de calle). Del mismo modo solicitamos a la Secretaría de Relaciones Exteriores. Por ser instancias gubernamentales se informa a la CNDH y el resultado es el carácter nugatorio de las instancias gubernamentales y las instancias del Estado.








viernes, 14 de febrero de 2025

Tacos. Detenciones ilegales y violación a derechos Humanos




 "Primero se llevaron a los judíos,

pero a mí no me importó porque yo no lo era.
Luego arrestaron a los comunistas,
pero como yo no era comunista, tampoco me importó.
Más adelante detuvieron a los obreros,
pero como no era obrero, tampoco me importó.
Luego detuvieron a los estudiantes,
pero como yo no era estudiante, tampoco me importó.
Finalmente detuvieron a los curas,
pero como yo no era religioso, tampoco me importó.
Ahora me llevan a mí, pero ya es tarde"

"autor anónimo",

René Loyo Cárdenas

Tennessee. El pasado 13 de febrero a través de las redes sociales y diversos periódicos locales dieron cuenta aquí en los Estados Unidos (USA), de que presuntos agentes del ICE vestidos de civiles detienen a tres trabajadores en una taquería de Memphis, pronto esta noticia se acompañó con una grabación de lo que se supone una redada entre el ICE y el FBI.

Hasta el momento no hemos recibido la información solicitada al consulado de México en  Atlanta que reúne los trabajos consulares de Tennessee y tampoco de la Secretaría de Relaciones Exteriores. Ante esta situación hemos pedido la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), consideramos un aberrante atentado a los derechos humanos.


Desde un inicio

En su campaña para la Presidencia de los Estados Unidos, Donal Trump, prometió poner en marcha el programa más radical para detener los grandes flujos de población migrante en este país.  Está en su derecho que el Presidente Trump implemente programas contra la población migrante y debe ser respetado. No, no es contra los derechos de sus ciudadanos, sin embargo, el Presidente prometió ir en contra de aquellos migrantes que por alguna razón tenían causas pendientes con la justicia. El resultado es que hoy aparecen diferentes servidores públicos operando de diferente manera sin respetar los protocolos que deben tener todos los servidores públicos responsables de hacer cumplir la ley, por lo que se destaca en las detenciones una falta a la legalidad, honradez, lealtad, imparcialidad y eficiencia en la función pública.

Ser migrante en cualquier país del mundo no te hace delincuente. ya que la inmigración irregular no es un delito penal, en los Estados Unidos, vivir y trabajar sin autorización legal es una infracción civil y nunca un delito penal. La población migrante jamás va a perder sus derechos humanos, muy a pesar de que son ellos quienes más padecen de abusos laborales, explotación, trabajo forzado, racismo, discriminación, inseguridad social y xenofobia.  


Por esta razón las personas encargadas de hacer cumplir la ley como son la Guardia nacional, El Ejército, las diferentes corporaciones de policías, todos aquellos que tienen la facultad de arrestar o detener a una persona migrante debe conocer los protocolos que Naciones Unidas ha publicado y promueve el respeto a los derechos humanos.


El video muestra cómo un grupo de sujetos sin uniforme, sin identificarse, se adentran al centro de trabajo, no hay sonido en el video, pero es fácil deducir que se presentan amenazas, no permiten que los jóvenes trabajadores se comuniquen con sus abogados o personas de su confianza. Los inútiles servidores públicos, regresan a un joven detenido a fin de que apague la plancha donde preparaban los primeros tacos. Las personas que se encontraron afuera refieren que son esposados y subidos a un vehículo. Sabemos que esposados fueron conducidos a otra ciudad y por la falta de información de las autoridades consulares. Son personas desaparecidas.  


domingo, 12 de enero de 2025

Pupusas y otras historias

 Pupusas y otras historias

René Loyo Cárdenas


Luisa María nació en El Salvador pequeña nación de América Central y evoca con orgullo a su abuelo que solía decir que era originario del Cuzcatlán, tierra de hombres y mujeres valientes, que se enfrentaron al imperio español registrando las primeras aguerridas batallas en la  defensa de la tierra de los indios en Acajutla y Tacuzcalco. Desde entonces este lugar al que se conoce hoy como República de El Salvador se le recuerda por su fuerte valentía y su asentada presencia de la cultura maya, náhuatl, kakawiras, pipiles, lencas y otras más.

En la década de los años treinta del siglo XX los militares concentraron el poder político y junto con una oligarquía local gobernaron este país. A principios de los años 70s, la Guardia Nacional dieron muerte a un numeroso grupo de opositores civiles, brutalmente con machete en mano, cortándolos y dejándolos a la luz como advertencia para la oposición al gobierno. Una multitud de organizaciones mostraron su inconformidad, y desde diferentes frentes dan paso a un movimiento de izquierda militar capaz de enfrentar a un gobierno apoyado por los Estados Unidos, surge la guerra civil. A la par de estas historias desde el púlpito de la iglesia católica crece la voz del arzobispo Oscar Arnulfo Romero, su trabajo parroquial, que incluía visitar cárceles, hospitales,  y así ayudar a los pobres. Pronto se convirtió en un líder protector de los derechos humanos en El Salvador. Denunció violaciones y se solidarizó con las víctimas de la violencia política.

El 2 de febrero de 1980, la Universidad Católica de Lovaina, le otorgó el doctorado honoris causa como reconocimiento por su lucha en defensa de los derechos humanos. En esa ceremonia pronunció parte de este discurso:


“(...) las mayorías pobres de nuestro país son oprimidas y reprimidas cotidianamente por las estructuras económicas y políticas de nuestro país. Entre nosotros siguen siendo verdad las terribles palabras de los profetas de Israel. Existen entre nosotros los que venden al justo por dinero y al pobre por un par de sandalias; los que amontonan violencia y despojo en sus palacios; los que aplastan a los pobres; los que hacen que se acerquen un reino de violencia, acostados en camas de marfil; (...) se ha perseguido y atacado a una parte de la iglesia que se ha puesto del lado del pueblo pobre y ha salido en su defensa”.

El 24 de marzo de 1980, en la Catedral de El Salvador, mientras celebraba misa fue asesinado.  La vida social en El Salvador entra en un grave estado de shock, donde la violencia institucional crece día a día. Para el año de 1986 un terremoto sacude las principales regiones productivas  por lo que las desigualdades sociales se acrecientan y la miseria se vive en toda la región.

En 1992, culminó la guerra cuando el gobierno y la guerrilla firmaron los acuerdos de paz, los que permitieron reformas militares, sociales y políticas. Hasta ese momento se reconoce la muerte de más de 75.000 salvadoreños. 


Tiempo de salir

En los años 70s y la década de los 80s, el flujo de salvadoreños que ingresaron a los Estados Unidos ha sido sin duda el más numeroso. A partir de los acuerdos de paz el gobierno de los Estados Unidos puso en marcha el programa Estatus de Protección Temporal TPS, en un primer momento para salvadoreños que se encuentran en los Estados Unidos que no pueden regresar a su país de origen debido a los peligros de la guerra o víctimas de los desastres naturales. Hoy es un programa permanente que permite el beneficio para El Salvador y otros países más. Es en este programa que hace posible que Luisa María se traslade a una parte de USA a trabajar en una fábrica de chocolates en Nueva York, pronto es invitada a trabajar en sus ratos libres en un restaurante Salvadoreño haciendo Pupusas, Ticucos que son los tamales rellenos de queso, frijoles y vegetales, Sopa de pata y Gallo en chicha. Es en este lugar donde va a conocer al amor de su vida y padre de sus hijos. José trabaja como mesero en un restaurante mexicano, sus compañeros le conocen como el “guanaco”. Luisa María y el Guanaco se casan, tienen dos hijos, trabajan mucho y sueñan regresar a su país. 

Pronto mandan dinero y construyen una vivienda en Ahuachapán Sur, cerca donde vive la familia del esposo y en lo que se conoce como Ahuachapán Norte construyen algunos cuartos para dormir y una accesoria en la que sueñan poner una tienda de abarrotes. Ambos jóvenes esposos sienten que han cumplido lo suficiente y deciden regresar a su país.


Historias de ciudad

El regreso no ha sido fácil ahora hay que acostumbrarse a vivir en una zona marginal donde los servicios de limpieza pública no existen. Muchas viviendas alrededor sufren de la carencia de agua y el desempleo se ha acrecentado. El fenómeno de las pandillas en las colonias marginales es enorme, siendo un problema de seguridad pública. En la vida cotidiana no es fácil, amigos y familiares piensan que por haber estado en los Estados Unidos tienen mucho dinero y por lo tanto pueden prestar a quien lo solicite. José realiza los trabajos donde será el negocio que les permita realizar, ahora su sueño Salvadoreño, nunca se traslada solo y siempre lleva a Alexis como acompañante. Sin embargo, ese joven adolescente  sobrino que realizaba siempre el acompañamiento de José comenzó a presentar una serie de conductas raras y una forma extraña de hablar, propia de los “mareros”. El día que se tatuó la cara, se dieron cuenta que tiempo atrás ya se había tatuado la espalda con el nombre de “la mara salvatrucha”.


La Romana

José le ha pedido a su sobrino que lo acompañe a la zona norte donde se encuentra en obra negra lo que será el negocio, al parecer ambos tienen una fuerte discusión que termina en un enfrentamiento. Al día siguiente Luisa María se entera que su sobrino ha matado a su esposo en La Romana y se da a la fuga. Los periódicos de entonces señalan que “un hombre perdió la vida supuestamente a manos de su propio sobrino, quien lo atacó con un arma blanca tras una discusión. en La Romana, la tarde de este miércoles. El fallecido José Cedano, de 53 años, fue hallado sin vida. El médico legista certificó que la causa de muerte fue heridas punzopenetrantes en el cuello y el tórax, provocadas con arma blanca. El sobrino Alexis Cedano, es detenido y trasladado al Centro Tutelar de Infractores ya que cuenta con solo 17 años de edad. Según el relato del agresor comenzaron a discutir por lo que Alexis reaccionó violentamente, tomó un arma blanca y, sin mediar palabras, lo atacó de manera letal”. 


El dolor

Luisa María lloró como nunca la pérdida de su esposo, su tristeza larga e intensa la han llevado a presentar una incapacidad para disfrutar otras cosas, su casa, su viaje, su sueño, sus hijos. Hay amargura y enojo, poco o nada expresa.

A ocho mesesde esta tragedia una nueva noticia sacude por completo la tristeza de Luisa María, se ha enterado que Alexis, su sobrino asesino, va a recuperar su libertad ya que las leyes a menores infractores así lo determinan.

Luisa María pide ayuda en la embajada americana y le permiten renovar su STP, jura ya no más regresar a El Salvador. Hoy vive en Massachuset, ni los años, ni la distancia le han quitado la amargura y su enojo, todo ha cambiado, incluso ya no come más pupusas. 


viernes, 3 de enero de 2025

Francisco se roba las propinas

 Francisco se roba las propinas


René Loyo Cárdenas


Massachusetts. La gran industria restaurantera en los Estados Unidos ha crecido tanto como también el número de trabajadores especializados que viven de ella. Según la oficina de Estadísticas de Empleo de los Estados Unidos más de dos millones de personas trabajan como meseros, cocineros y reciben propinas o “tip”. Se especula que la palabra “Tip” es un acrónimo de “To Insure Promptitude” (para asegurar la prontitud que aparecía impreso en las cafeterías británicas ).

En Estados Unidos no es obligatorio dar propinas, pero dejar algo de dinero tras el servicio recibido es una norma no escrita y bien recibida por cocineros, meseros, garroteros y bartenders. “Las propinas ayudan a todos los que trabajan en un restaurante”, explica una joven que labora como mesera en un restaurante ubicado en el estado de Massachusetts y agrega “si no entran clientes, no ganamos, pero si entran muchos clientes, dejan tips, los repartimos para todos desde cocina hasta meseros y esto nos permite tener un buen día”. Todos saben que no es una obligación pero sí es una gratitud por el servicio recibido.



Los orígenes de la propina

La historia de las propinas es incierta, siempre suele estar llena de controversias y su permanencia refleja una situación de abuso y desigualdad laboral.

Se dice que en la época medieval en Inglaterra los aristócratas solían dar a la servidumbre un dinero extra por los servicios recibidos. De allí esta manera de relacionar un servicio se fue extendiendo a posadas y restaurantes en países de Europa y América. 

Después de la guerra civil en USA la costumbre de las propinas se extendió pero no siempre fue bien recibida ya que para muchos estadounidenses esta práctica fomentaba y distinguía aún más la desigualdad de ricos y pobres.

En 1904, se creó en Georgia la Sociedad Anti-Propinas y logró reunir a más de 100,000 miembros  que se comprometieron a no dar propinas durante un año, según cuenta el New York Time. A partir de 1909 se promulgaron diferentes leyes contra las propinas, pero en 1926, todas esas leyes fueron derogadas.  Desde entonces las propinas han pasado a convertirse en una práctica común del ciudadano americano.

En 1966, surge el “Tip Credit”, que es la ley que permite a las empresas pagar menos a empleados  con la suposición  de que las propinas llenarían el vacío. 

Algunos autores como Kerry  Segrave (Tipping: A social History), señalan que algunos empleadores utilizaron las propinas para mantener los salarios bajos. Si bien es cierto que no se trataba de una práctica racista, el racismo impregnaba a la sociedad estadounidense en la forma de dar propina. Segrave relata incidentes sureños blancos que se negaban a dar propina a trabajadores negros.

Con los años el gobierno federal ha establecido varias normas para proteger a los trabajadores que reciben propinas y en los estados se han implementado diferentes normas basadas en las leyes estatales.


Historias de ciudad

Ramiro Navarro es originario del estado de Monterrey, México, su infancia transcurrió desde el rancho y parte de la vida urbana, en una familia numerosa pronto dió señales de que la cocina era parte de su vocación, así que pronto aprendió los guisos caseros  y el icono de la gastronomía  regiomontana el fabuloso cabrito. A los 20 años de edad mostraba su habilidad de cocinar el cabrito con leña de mezquite, la arrachera, el asado de puerco, la machaca y la carne asada. Tuvo un paso fulminante en diferentes restaurantes de la ciudad y pronto llamó la atención de los cazatalentos para llevarlo a los Estados Unidos pero decidió emigrar a Europa propiamente Barcelona donde mostró sus habilidades en los tacos al pastor. La nostalgia de su lugar de origen y su espíritu aventurero lo llevó de regreso a su tierra y el oficio bien aprendido para capturar los sabores lo trasladó a los Estados Unidos. Su llegada ha sido como la de cientos de personas que buscan una oportunidad laboral (a través del pollero).

Su estancia en los Estados Unidos le ha permitido laborar en Tennessee, Texas, New Jersey y Japón. Su llegada a New Hampshire ha sido por su habilidad de cocinar y adaptarse a otros estilos culinarios. Su estancia de once meses en este último restaurante estuvo llena de promesas incumplidas, en las primeras semanas recibía una buena paga de propinas, luego las disminuyeron hasta dejarlo fuera de propinas. El argumento es que al no tener papeles él recibía un salario a partir de las propinas acumuladas, por esta razón su salario nunca lo recibía en el tiempo que le correspondía. El día que recibió su permiso de trabajo presentó  su renuncia, le hicieron firmar un monto de papeles, y Francisco el dueño del restaurant le informó que tenía que recuperar el dinero de su salario así que alteraría ante las instancias gubernamentales el informe real de su salario y del que se tendría que pagar los taxes correspondientes. El asunto lo tiene un abogado, quien no duda en señalar que “Francisco miente y se roba las propinas”. 


Qué dice la ley

La ley en los Estados Unidos señala que las propinas no se le debe negar a ningún  empleado, mucho menos decir que a unos si se les debe pagar y a otros no. Este hecho puede presentar su queja el agraviado ante el Departamento de Trabajo de los Estados Unidos. La ley establece que los empleadores no pueden retener ilegalmente las propinas de los empleados, tampoco puede señalar que unos las reciban y otros no, ya que se estaría realizando una práctica laboral racista. Por lo que una demanda puede hacer que Francisco devuelva las propinas retenidas a todos los empleados y recibir las sanciones laborales correspondientes.

Ramiro considera que no es posible ganar la demanda ya que el uso discrecional con el que se recibe el dinero permite que el dueño, en este caso Francisco, manifieste solo una parte del dinero y el se queda con el resto.

El abogado señala que no es así, Ramiro como los demás integrantes de cocina tienen derecho a quedarse con las propinas de su salario regular. Si su jefe se apropia indebidamente de sus propinas se debe presentar una queja ante las oficinas laborales.

Esta historia apenas comienza para Ramiro, así que pronto nos informará que sucede.


viernes, 13 de diciembre de 2024

Fruta extraña

Fruta extraña


 

René Loyo Cárdenas


En 1933, el compositor y poeta estadounidense Abel Meeropol, pública el poema “Strange Fruit” (Fruta Extraña), ante el dolor que provoca ver en la portada de un periódico el linchamiento de dos hombres de piel negra, en el estado de Indiana. Una práctica que en ese entonces alcanzaba niveles de jolgorio en muchos lugares de los Estados Unidos por parte de la población de color blanca de piel.


Laura Duncan cantante de jazz, blues y música de protesta es la primera en

interpretar “Strange Fruit” en las tertulias universitarias, en las reuniones sindicales y en el apoyo al movimiento social “The people 's songs” (las canciones del pueblo). En el año de 1937, esta misma cantante, la interpreta en el marco del Festival Anti-Fascista (1937), Madison Square Garden de Nueva York.


En 1939, en la ciudad de Nueva York, al interior de una cafetería, finaliza su ronda de canciones una jovencita negra de 23 años, Billie Holiday, pide como último número de la noche, que los meseros dejen de servir, que se apaguen la luz del antro y solo sea una la que enfoque su negro rostro, a fin de poder mostrar en la canción un acto deprotesta y de injusticia, en ese momento deja salir su voz suave, cruda y emotiva el poema de Abel Meeropol, he aquí parte de un fragmento:


“Los árboles del sur

dan un fruto extraño,

Sangre en las hojas

y sangre en la raíz.

Cuerpo negro

balanceándose en la brisa del sur.

Fruto extraño colgado de los alamos”.


Al término de la canción, las luces en el escenario volvieron a encenderse y la figura diminuta de la cantante había huido ante los rostros perplejos de un poema desgarrador que poco a poco se fue unificando con las palmas de los asistentes.


Durante los siguientes 20 años Billie Holiday, cantó y grabó esa canción que ella

misma declaraba que no le gustaba ya que recordaba a su padre que veinte años

después “las cosas que lo mataron siguen sucediendo en el sur”.


Cuando la canción se grabó pronto se convirtió en un himno de protesta para los

activistas y defensores de los derechos humanos de la población negra. Otros

sectores más se fueron sumando, pero hubo otros más que mostraron su enérgico rostro de intolerancia, fue el caso del comisionado de la oficina Federal de Narcóticos, Harry Anslinger, conocido racista que se dedicó a perseguir a la

población negra sobre todo a cantantes de jazz negros, que fumaban marihuana, 

consideraba que esta era la razón de crear “música del diablo”.


El comisionado Anslinger se entrevistó con Billie Holiday y le pidió que no cantará

más esa canción, Holliday se negó y entró otra manera más perversa para

detenerla. Sabiendo que la artista gustaba de consumir alguna droga hizo que le

llegará heroína y de esta manera poder fincarle responsabilidades y someterla

durante un tiempo en la cárcel. Dos años después de su encerramiento, cuando recobra su libertad, deambula por las calles de la ciudad, los recuerdos se han convertido en verdaderos demonios de su vida, su madre la parió a los 13 años y durante su crecimiento fue testigo y víctima de abusos en esa vida sumamente pobre y accidentada. La cárcel ha dejado sus estragos y su salud muestra cirrosis, pulmones averiados y una actividad cardiaca sumamente alterada. Pronto encontró la posibilidad de que fuera recibida en un hospital para su tratamiento, pero aquel oficial de la policía jamás le perdonó la afrenta y ordenó que fuera esposada en la cama y le negaron cualquier tipo de tratamiento y es así como Billie Holiday muere.

A pesar de la muerte prematura, la canción ha obtenido 23 nominaciones del premio Grammy póstumamente y forma parte del salón de la fama en el Rhythm & Blues. En 1999, la revista Time la nombró como la canción del siglo.


Fruta extraña, lamento y memoria, la voz y la historia de un grito de protesta que nos toca a todos conocer.


sábado, 7 de diciembre de 2024

Dios le pague…

Dios le pague...


 

René Loyo Cárdenas


En muchas ciudades de los Estados Unidos gran parte de la población migrante vive hoy el miedo y la incertidumbre por la llegada oficial de Donal Trump a la Casa Blanca y su amenaza de las deportaciones masivas. 


Durante la campaña electoral Donal Trump advirtió “lanzaré el programa de deportación más grande en la historia de Estados Unidos para sacar a los criminales”, por lo que el pasado 11 de noviembre nombró a  Thomas Douglas Homan un expolicía, oficial de inmigración y comentarista político a quien conocen ya como el “zar de la frontera”, responsable de expulsar masivamente a los extranjeros indocumentados.


Historias de ciudad

Fred nació en una colonia popular ubicada al norponiente de la ciudad de México (Azcapotzalco), llegó a los Estados Unidos, junto con su madre y hermanos siendo él un niño. Su ingenio lo llevó a estudiar en Theological Seminary, donde años más tarde, se graduó como Pastor, allí conoció a Nancy una ciudadana americana, comenzaron una amistad que los llevó a contraer matrimonio y ambos  con la llegada de el primer hijo, crearon su propia iglesia en Tennessee para promover el evangelio de la biblia. A la par Fred creó una cadena propia y exitosa de restaurantes de comida mexicana, sus empleados eran todos inmigrantes. Sin embargo hace dos años la prensa local dio a conocer una denuncia de un joven trabajador hondureño con el que se logró conocer el fondo de la empresa. 

Fred solía poner anuncios solicitando cocineros para los Estados Unidos a través de las redes sociales en México. Ante la imposibilidad de contar con visa, se presentan los llamados “polleros” o “coyotes” (que el empresario pastor previamente concreta). Los inmigrantes se trasladan hasta la frontera y contactan con el “coyote”, quien los lleva  a una casa de seguridad, donde son  resguardados durante un tiempo, para después burlar a las autoridades migratorias. Si son interceptados por las autoridades americanas, se volverán a la casa donde han estado confinados para que en otro momento vuelvan a intentar cruzar las veces que sea necesario.


El nuevo hogar

Aquellos que han logrado pasar, tienen el recuerdo presente que en esas casas donde son aislados los visitan hombres jóvenes armados, por lo que se habla poco y se deduce que forman una cédula que pertenece a la organización de un  cartel dedicado a un trabajo del que nada se sabe pero que se desarrolla en las fronteras de ambos países.


Si se logra burlar la vigilancia migratoria otras son las personas que conducen a los inmigrantes en vehículos hasta llegar al aeropuerto, en el trayecto les proporcionan indicaciones muy precisas de la manera de comportarse ya que por primera vez abordarán un avión, sus emociones fuertes y complejas son difícil  describir. 

“Bienvenido a América”, son las palabras con las que son recibidos y trasladados a su nuevo hogar donde muchos iguales a ellos, los esperan, sus miradas de adolescentes ávidos rompen el silencio y cada uno narra su manera particular de vivir la experiencia. Sus pares, sus compatriotas muestran lo que será su cama, el baño con tina, regadera y suficiente agua caliente, pronto vendrá el pastor y lo llevará a cenar no sin antes hacer una oración comunitaria para agradecer a Dios que el viaje valió la pena, burlar a la migra le ha permitido tener casa, comida, transporte, trabajo y amigos que lo acompañan.


El Pastor lo llevará a cenar y les informará la parte principal del contrato verbal: tres años trabajando con el mismo salario, del que le será descontado un porcentaje menor para pagar la deuda ocasionada al “coyote”, el resto de salario le permitirá mandar a su familia y tener lo indispensable para lo suyo. No se paga renta. No hay vacaciones ni permisos para ausentarse. Quienes no cumplan y abandonen su “nueva” casa serán considerados traidores y son advertidos que la maña (el cartel), se desplazará hasta donde sea necesario para encontrar a  su familia, hacerle daño y de esta manera recuperar la inversión de la deuda contraída.


La doble moral

El hecho arriba mencionado fue un escándalo en toda la ciudad de Tennessee y más allá del estado. Un pastor de culto cristiano fue evidenciado en su doble moral por los abusos a la población inmigrante. El consulado mexicano no intervino ya que a ellos no les llegó solicitud de denuncia alguna. Las organizaciones sociales dejaron de intervenir. En un tiempo aproximado de tres meses las autoridades americanas exoneraron al empresario pastor. La agencia federal independiente (EEOC) que tiene la autoridad para hacer cumplir las leyes de derechos civiles para los empleados guardó silencio. La Junta Nacional de Relaciones Laborales (NLRB) que trabaja para asegurar que existan prácticas laborales justas en el lugar de trabajo, al parecer jamás se enteraron y si se enteraron negaron cualquier tipo de abusos. Nadie hizo público un informe final.


A manera de rumor se manejó al interior de la cocina-iglesia-empresa, que el pastor empresario no recurrió a ningún “acto ilegal”, por lo que fueron convocados  los trabajadores para asistir a la casa del patrón a celebrar y agradecer el resultado.

Hoy en esta ciudad parece que nadie recuerda este caso. El pasado domingo el pastor empresario Fred  ha tenido a bien señalar en su iglesia “Nuevo despertar”, la importancia que es para el ser humano decir la verdad con amor y vivir la verdad en la vida cotidiana, y agrega que “el ser humano debe ser honesto en el trabajo y con su comunidad”. 


La homilía ha terminado, y todos los asistentes se saludan y se despiden a fin de llegar a sus casas. Hoy han asistido pocas personas, desde que se hizo pública esta disputa con los trabajadores de la empresa. Hemos contactado con uno de esos matrimonios que solía frecuentar esta predica pero ya no lo hacen más, a nuestra pregunta acerca de lo que piensan de este conflicto el hombre se niega a responder, mientras se aleja, la mujer, se voltea y expresa: “Que Dios le pague tamaña indecencia a ese pastor”. Alguien tenía que decirlo y se dijo. No hay más.


Nota: Los nombres verdaderos han sido cambiados.


miércoles, 10 de enero de 2024

Odysea

 



René Loyo Cárdenas 

En 1968, el destacado director de cine, guionista, productor y fotógrafo estadounidense Stanley Kubrick, alcanzó la cumbre de su carrera con la película de ciencia ficción 2001: A Space Odyssey,  filme de ciencia ficción y que hasta la fecha es considerada una de las mejores de la historia dentro de su género. De acuerdo a la ficha técnica: “Después de descubrir un misterioso artefacto enterrado bajo la superficie lunar, se envía una nave espacial a Júpiter para encontrar su origen: una nave espacial”. El realismo empleado en los efectos especiales y las proyecciones vanguardistas hicieron que este trabajo sea considerado como una película de culto. En 1991, la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos la nombró como un trabajo “cultural, histórica y estéticamente significativo” por lo que fue seleccionada para su preservación en el National Film Registry.


Todo este recuerdo sin duda lo evocó en el preciso momento que me encuentro saboreando un delicioso café en Bristol New Hampshire,  cuyo nombre de la cafetería es el de Odysea, y la persona que nos atiende nos señala que ese delicioso café que hoy disfruto se produce en microlotes en Yaunera, Copán, una región de Honduras conocida por sus antiguas ruinas mayas, a 1500 metros sobre el nivel del mar y es  donde se encuentra la finca que cultiva este café delicado de olor seco y fresco que presenta un sabor a chocolate amargo, bayas y vino tinto.

A un costado de mi mesa se encuentra un matrimonio que envueltos en su entusiasmo señala que ha degustado un sándwich de chorizo y su esposa ha pedido un panecillo simple de huevo con tocino, ambos con resultados muy positivos. Pregunto al mesero que tiene de especial el chorizo que allí sirven y comenta que normalmente en los restaurantes los chorizos que se sirven son embutidos cárnicos secos cargado de especias propias de la influencia española y arabe. Aquí tanto el chorizo como la salchicha americana, son parte de la receta de casa, por lo que se cocinan y se presentan con la frescura que produce el lugar. 

El recuerdo de Odysea película y el estar sentado en Odysea cafetería en verdad guardan un paralelismo. El primero tiene un lugar en el mundo cinematográfico de este país y la cafetería construye a grandes pasos su historia rica en sabor desde el condado de Grafton en el estado estadounidense de New Hampshire. En horabuena por este proyecto gastronómico.